La memoria descriptiva de un proyecto arquitectónico es mucho más que un complemento de planos. Se trata de un documento técnico, narrativo y argumentativo que explica el diseño desde sus fundamentos conceptuales hasta sus soluciones constructivas y normativas. En el contexto mexicano, su correcta elaboración es clave para obtener autorizaciones de obra, tramitar licencias, coordinar disciplinas técnicas y facilitar la ejecución del proyecto en campo.
Ya sea para un anteproyecto o un expediente ejecutivo, la memoria descriptiva actúa como columna vertebral del diseño. A continuación, exploramos en profundidad qué debe contener, cómo debe estructurarse y qué errores deben evitarse.
¿Qué es una memoria descriptiva y por qué es vital?
La memoria descriptiva es el documento que justifica técnica, funcional y normativamente el diseño arquitectónico propuesto. Resume las decisiones de proyecto con base en las condiciones del sitio, requerimientos del cliente, normativas aplicables, y criterios de eficiencia espacial y energética.
Su importancia radica en que:
Articula el diseño para terceros: facilita la comprensión del proyecto para clientes, autoridades, contratistas y especialistas técnicos.
Es documento obligatorio en trámites ante municipios, instancias estatales o federales (INAH, SEDATU, IMSS, etc.).
Sirve como herramienta legal y contractual, respaldando decisiones durante la ejecución de obra y la supervisión.
Apoya en licitaciones públicas y privadas, funcionando como sustento técnico para precios unitarios y propuestas económicas.
Contenido mínimo recomendado para México
Aunque no existe una plantilla única, los siguientes apartados son ampliamente reconocidos por autoridades y colegios de arquitectos en México:
1. Datos generales del proyecto
Nombre del proyecto (residencial, comercial, institucional, etc.)
Ubicación completa con calle, colonia, municipio y estado
Nombre del propietario y del proyectista con número de cédula profesional
Fecha de elaboración
2. Características del predio
Superficie del terreno (m²)
Dimensiones y colindancias
Uso de suelo permitido (según el Plan de Desarrollo Urbano o PDU)
Densidad habitacional o intensidad de uso permitida
Restricciones físicas o normativas (servidumbres, altura, porcentaje de área libre)
Este apartado es especialmente importante en zonas con protección patrimonial, como el centro histórico de Oaxaca o colonias con regulación de imagen urbana.
3. Objetivo del proyecto
Breve descripción de lo que se busca construir o intervenir. Por ejemplo:
“El presente proyecto consiste en el diseño de una vivienda unifamiliar de dos niveles con un programa arquitectónico que incluye sala, comedor, cocina, tres recámaras, cochera y área de jardín, pensada para una familia de cinco integrantes y con criterios de eficiencia energética.”
4. Criterios de diseño
Describe cómo se abordó el proyecto desde el punto de vista espacial, contextual y funcional:
Relación con el entorno urbano o natural
Orientación solar y ventilación cruzada
Jerarquización de espacios
Privacidad y transición entre áreas
Accesibilidad universal
Adaptación a la topografía
También es útil mencionar influencias culturales o del entorno, por ejemplo, el uso de materiales tradicionales en comunidades rurales de Oaxaca.
5. Descripción arquitectónica general
Número de niveles
Área construida total (por nivel y en total)
Porcentaje de área libre
Descripción breve de cada espacio y su función
Relación entre espacios (interior-exterior, público-privado)
Es común presentar esta sección como una narrativa por planta o por sistema (habitacional, servicios, circulaciones, etc.).
6. Materiales y acabados
Enumera los materiales propuestos por sistema constructivo:
Muros: block hueco de concreto, tabique rojo recocido, etc.
Cubiertas: losa maciza de concreto armado, techo a dos aguas con teja, etc.
Pisos: concreto pulido, cerámica tipo rústico, porcelanato
Carpintería y cancelería: aluminio negro línea 3″, madera de pino con barniz, etc.
Acabados exteriores: aplanado fino con pintura vinílica, recubrimiento pétreo
Debe reflejar el carácter del proyecto y su viabilidad constructiva.
7. Instalaciones
Describe de forma general la solución adoptada para cada instalación:
Eléctrica: canalización empotrada, uso de tierra física, tableros y protecciones
Hidrosanitaria: alimentación con cisterna y bomba, drenaje a red municipal o fosa séptica
Pluvial: bajantes independientes, canaletas
Gas LP: tubería de cobre tipo L, gabinete exterior
Redes y datos: ductería oculta, canalización desde centro de cómputo o acometida
Si el proyecto lo amerita, incluir también climatización, voz y datos, sistema de riego o domótica.
8. Normativas aplicables
Citar expresamente las normas y reglamentos utilizados, por ejemplo:
Reglamento de Construcciones del Municipio correspondiente
Normas Técnicas Complementarias (CDMX u otras entidades)
Normas Oficiales Mexicanas (NOMs de instalaciones eléctricas, gas, agua potable)
Códigos de accesibilidad y movilidad universal
Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, en caso de impacto ambiental
Este apartado ofrece respaldo técnico y legal ante autoridades.
9. Sustentabilidad y eficiencia energética
En proyectos contemporáneos, se espera que incluyan estrategias sostenibles, como:
Uso de ventilación e iluminación natural
Captación y reuso de agua pluvial
Calentadores solares o paneles fotovoltaicos
Materiales locales o con bajo impacto ambiental
Aislamientos térmicos o celosías que reduzcan carga térmica
En algunos estados (como Ciudad de México o Jalisco), es obligatorio acreditar medidas de eficiencia energética desde el anteproyecto.
10. Conclusiones
Breve resumen del proyecto, destacando sus virtudes funcionales, formales o sociales. Se puede incluir una reflexión del autor sobre el impacto positivo del proyecto en la comunidad o el entorno construido.
Errores comunes al redactar memorias descriptivas
Copiar fragmentos genéricos sin adaptarlos al proyecto real.
Incongruencias con los planos u otras memorias técnicas.
Redacción ambigua o poco clara.
Omitir normativas específicas aplicables al lugar.
Excesiva extensión sin orden o estructura lógica.
Recomendaciones finales
Revisa que haya concordancia entre planos, memoria y cuantificación.
Usa un lenguaje técnico pero accesible.
Apóyate en esquemas, tablas o diagramas cuando sea necesario.
Consulta las guías técnicas de colegios de arquitectos o reglamentos locales.
Considera actualizar el documento conforme avanza el desarrollo del proyecto.
La memoria descriptiva es una herramienta indispensable para el éxito de un proyecto arquitectónico. Más allá de un requisito normativo, permite comunicar eficazmente la lógica detrás del diseño, evitar errores en obra y respaldar técnica y legalmente cada decisión tomada. En Santiago González Consultoría y Construcción, acompañamos a nuestros clientes desde la concepción de la idea hasta la entrega de expedientes técnicos completos, asegurando claridad, coherencia y cumplimiento normativo en cada memoria descriptiva.
Referencias bibliográficas:
Gobierno de la Ciudad de México. (2020). Reglamento de Construcciones para el Distrito Federal. https://www.cdmx.gob.mx/storage/app/media/RCDF_2020.pdf
Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México. (2021). Manual de documentación técnica para proyectos arquitectónicos.
Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU). (2022). Normas técnicas complementarias para vivienda. https://www.gob.mx/sedatu
Instituto Nacional del Suelo Sustentable (INSUS). (2023). Guía para la elaboración de expedientes técnicos. https://www.insus.gob.mx
Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (CONUEE). (2021). Lineamientos para el diseño arquitectónico con eficiencia energética. https://www.gob.mx/conuee
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